ue cada noche realizaba con éxito del tema de Renato Carossone "Bambino Piccolino", le valieron su apodo. El poderío de su voz, la teatralidad, el sentimiento y su duende natural, lo convirtieron en un cantaor inimitable y genuino del desamor y la nostalgia, engradeciendo su más que original arte. Todo Bambino era flamenco, un flamenco festero poblado de bulerías y rumbas, de letras hirientes, desgarradas y enérgicas, con un toque personal y contagioso propio de artistas mayúsculos; El Rey de la Rumba lo llamaban. Fue enorme, un coloso creador y testigo de su propio género; destinado a adaptar coplas, rancheras o boleros, títulos prestados, letras y compases de Machín o Gardel, crecidos y distintos en un Bambino que los convirtió en únicos. Acompañado por el éxito vivió en la cumbre durante casi tres décadas, superó los nuevos sonidos anglosajones y el yéyé patrio, e incombustible llenó todas sus actuaciones en unos 70 y 80, donde no dejó de brillar.
Su legado, nos acerca a la grabación de más de 500 títulos y la publicación de 17 albumes, con un trabajo en directo contado por miles. Y no se equivoquen, la cantidad de su obra nunca abandonó la calidad de su trabajo, canciones como: "No me des guerra", "Se me va", "Procuro Olvidarte", "La pared", "Soy lo prohibido" o "Payaso", son ya cátedra en el flamenco. Bambino, falleció en Utrera el 5 de Mayo de 1999, un cáncer de garganta le ganó la batalla. Artista de artistas con reconocimientos, estatuas y homenajes honrándole tras su muerte: Sabina, Serrat, El Cigala, Bunbury o Bebo Valdés le recuerdan en el disco "Bambino por tí y por nosotros" (2004), a la memoria de un cantaor que ya es leyenda.
Aquí les dejó, la interpretación en directo del tema Se me va.
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